¿Qué es Emprendedurismo y cómo funciona?

El Emprendedurismo es la habilidad de concebir, manejar y llevar a cabo proyectos, convirtiendo ideas en productos, servicios y negocios. Este concepto también se refiere a la iniciativa de proponer e implementar cambios en empresas ya existentes.

Se habla mucho de cómo los emprendedores tomaron sus ideas y las convirtieron en proyectos exitosos. Pero, ¿qué significa realmente ese concepto? ¿Cuáles son sus objetivos? ¿Qué se necesita para invertir en él?

Para responder a cada una de tus preguntas, hemos elaborado esta guía completa con todo lo que necesitas saber sobre el emprendimiento e incluimos algunos consejos para aquellos que están considerando este camino.

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¿Qué es el Emprendedurismo?

El Emprendedurismo es la capacidad de desarrollar y llevar a cabo proyectos, convirtiendo ideas en productos, servicios y negocios en general.

También podemos entender el emprendimiento como la iniciativa de sugerir e implementar cambios en empresas que ya existen en el mercado.

En el mundo empresarial, podríamos decir que el emprendimiento es el acto de crear nuevas soluciones, transformar negocios, modificar procesos y cualquier iniciativa que fomente la evolución del mercado y tenga un impacto en él.

Además, el emprendimiento es un escenario con un gran potencial para el desarrollo profesional, ya que al surgir nuevos negocios enfocados en satisfacer necesidades específicas de un público determinado, los emprendedores pueden aprovechar estos nuevos hábitos de consumo para identificar oportunidades.

La «fórmula» para un emprendimiento, según el asesor estadounidense Steve Cobak, es la siguiente:

Pero, ¿Qué significa esto? Emprender requiere una inversión, no solo financiera, sino sobre todo de tiempo. Para lograr el éxito, es necesario ofrecer una solución real: dedicarse a desarrollar un factor diferencial para tu negocio, pensando en cómo las personas van a usar en la vida cotidiana lo que ofrece tu negocio y por qué van a elegir tu marca en lugar de la competencia.

¿Cómo surgió el concepto de Emprendedurismo?

Aunque hoy en día el emprendimiento es una palabra bastante popular, no es un término tan actual como parece. El concepto comenzó a ganar notoriedad en el ámbito académico a mediados de 1945 gracias al economista austro-estadounidense Joseph Schumpeter.

En un principio, la palabra se utilizó como punto de partida para la «Teoría de la Destrucción Creativa«, concebida por el economista. Según Schumpeter, el emprendimiento es una práctica reservada a personas versátiles, con habilidades en producción, organización financiera y ventas.

Con el paso del tiempo, el concepto fue evolucionando hasta convertirse en lo que conocemos hoy en día. Parte de esta transformación provino del académico Robert D. Hisrich en su libro «Entrepreneurship«.

Para Hisrich, el emprendimiento es el proceso de crear algo nuevo y valioso, dedicando tiempo y esfuerzo, asumiendo los posibles riesgos económicos, psicológicos y sociales, con el objetivo de obtener recompensas económicas y personales.

¿Qué significa ser emprendedor?

A partir del concepto de emprendimiento, podemos definir al emprendedor como aquel que lidera proyectos innovadores, promueve transformaciones y ve oportunidades en lugares inexplorados.

Un emprendedor es la persona que pone en práctica nuevas ideas y realiza cambios allá donde va.

• el creador de un nuevo invento;
• el diseñador de un nuevo producto o servicio;
• el establecedor de una empresa o institución;
• el generador de un cambio significativo;
• el dueño de un sitio web, blog o tienda en línea;
• y cualquier persona que esté detrás de algo novedoso e innovador.

Cualidades de un emprendedor

• Iniciativa: el emprendedor sabe cuándo tomar acción y aprovecha las oportunidades.
• Confianza en sí mismo: cree en sus ideas y sabe cómo defenderlas.
• Valentía: el emprendedor no teme correr riesgos o fracasar; los desafíos lo impulsan.
• Optimismo: ¿pensamiento negativo? ¡De ninguna manera! Un emprendedor siempre es optimista respecto a sus proyectos e ideas.
• Persistencia: rendirse no es una opción, un emprendedor es perseverante y hace todo lo posible para lograr sus metas.
• Resiliencia: el emprendedor tiene la habilidad de enfrentar situaciones adversas e incluso beneficiarse de ellas; se recupera de situaciones difíciles, aprende de las adversidades y sigue avanzando hacia el futuro.
• Liderazgo: actúa como guía de las iniciativas y los equipos, liderando y dirigiendo cada etapa del proyecto.
• Habilidad para relacionarse: el emprendedor sabe que el trabajo en equipo puede ser mucho más efectivo; por eso, se asegura de mantener buenas relaciones profesionales.

Tipos de emprendimiento

A lo largo de los años, el concepto de emprendimiento no solo ha evolucionado, también se ha fragmentado, permitiendo la aparición de diferentes categorías.

Como resultado, hoy existen tantos tipos como mercados explorados por las personas para dar vida a su proyecto emprendedor.

Con esto en mente, elaboramos una lista con los principales tipos de emprendimiento para que descubras cómo funciona cada uno.

• Emprendimiento digital
• El emprendimiento digital involucra negocios y soluciones que se desarrollan en el entorno virtual. Desde tiendas en línea hasta aplicaciones y redes sociales, todo lo que se lleva a cabo en internet puede considerarse parte de esta categoría.
• En Argentina, por ejemplo, hay un enorme potencial para los emprendedores digitales, especialmente en el ámbito del comercio electrónico. Según la agencia eMarketer, en 2020, el mercado minorista de comercio electrónico en el país experimentó el crecimiento más rápido del mundo, con un aumento del 79% en comparación con el año anterior.
• Emprendimiento de negocios
• El emprendimiento de negocios implica la creación y desarrollo de empresas comerciales tradicionales.
• Se centra en la creación de productos y servicios en general, con el objetivo de obtener beneficio económico. Los emprendedores que trabajan en esta área deben estar atentos a las nuevas necesidades del mercado, ya que ahí es donde surgen las oportunidades.
• Emprendimiento corporativo
• El emprendimiento corporativo, o intraemprendimiento, tiene lugar dentro de una organización y se enfoca en implementar mejoras. Ya sea mediante nuevas soluciones o la reestructuración de procesos, el objetivo del emprendedor corporativo es impulsar transformaciones.
• Este modelo es muy común en empresas modernas, como las startups, donde existe una fuerte cultura de compartir ideas. El emprendimiento corporativo suele beneficiar a las empresas que buscan actualizar sus procesos y destacarse en el mercado.
• Emprendimiento social
• El emprendimiento social tiene como objetivo implementar mejoras orientadas a la comunidad. A diferencia de los otros modelos, las instituciones se centran en llevar a cabo proyectos que ayuden a un colectivo o causa específica.
• Dentro del emprendimiento social se incluyen las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) que trabajan para combatir el hambre, por ejemplo. Los emprendedores sociales son diferentes de los demás, ya que se centran en defender sus ideales y garantizar que su institución tenga un impacto positivo en la sociedad.
• Emprendimiento verde
• El emprendimiento verde está relacionado con el emprendimiento social, pero su enfoque se centra en la preservación del medio ambiente.
• En este modelo, las instituciones se crean para abordar temas ambientales de interés público. Por lo general, no buscan obtener beneficios económicos, sino que monitorean e intervienen directamente en agendas que puedan amenazar de alguna manera al medio ambiente.
• Emprendimiento femenino
• El emprendimiento femenino promueve la presencia de la mujer en todos los sectores del mercado. El objetivo es que la presencia femenina en puestos de poder se normalice.
• El papel de una mujer emprendedora también implica buscar oportunidades para promover la diversidad en el entorno empresarial. Además, busca apoyar proyectos creados por otras mujeres y fortalecer una red de conexiones entre mujeres profesionales.
• Emprendimiento individual
• El emprendimiento individual se refiere a pequeñas empresas gestionadas por una sola persona.
• Los profesionales que desarrollan y ofrecen servicios de forma independiente, como autónomos o responsables inscriptos, por ejemplo, pueden considerarse emprendedores individuales. Lo que diferencia a este modelo de otros es la falta de socios e inversores.
• Emprendimiento cooperativo
• El emprendimiento cooperativo promueve la unión de varios emprendedores con un objetivo común. En estos casos, los profesionales se unen para dar vida a un proyecto específico.
• Funciona como una red de apoyo en la que cada emprendedor brinda lo que tiene. Siguiendo el concepto de economía colaborativa, todas las decisiones se toman de manera democrática, al igual que el reparto de los gastos y beneficios obtenidos.

6 consejos para emprender

Cuando se trata de emprendimiento, no hay reglas absolutas. Esto se debe a que estamos hablando de un escenario que promueve cambios y transformaciones.

Sin embargo, hay algunas prácticas que pueden ayudarte a emprender con éxito, y a continuación las compartimos contigo:

1. Define tu actividad

En primer lugar, analiza todas las posibilidades y comprende cuál es la que tiene más sentido para tu idea.

• ¿Vas a convertir tu proyecto en un producto físico?
• ¿Tu idea se relaciona más con un servicio, como la venta de cursos en línea o asesorías?
• ¿Se desarrollará en el mercado en línea o fuera de línea?
• ¿Tiene un propósito social?
• ¿Cuál será tu nicho de mercado, es decir, ese grupo de consumidores que aún no ha sido atendido por la competencia y que representa una oportunidad de negocio para ti?

Ten en cuenta que conocer dónde quieres actuar es el primer paso para comenzar a darle forma a tu proyecto.

2. Diferenciarte

Si estás pensando en desarrollar un producto o servicio que ya existe en el mercado, es esencial que encuentres la forma de diferenciarte.

Debes realizar un análisis exhaustivo del mercado y la competencia para identificar oportunidades que te permitan ofrecer algo mejor, superior, innovador o altamente competitivo.

3. Validar tu idea

Después de definir tu proyecto, pero antes de empezar a trabajar en él, es importante que hables con personas que puedan identificarse con la solución que estás desarrollando y escuchar atentamente sus opiniones.

El feedback de otras personas puede ser muy esclarecedor para tu proceso creativo y puede generar aportes importantes para el proyecto. A menos que estés creando algo exclusivamente personal, asegúrate de que tu idea tenga sentido para los demás.

4. Elaborar un plan financiero

Iniciar un proyecto, por más simple que sea, requerirá de inversión. Por eso, es necesario que plasmes en papel todos los costos necesarios para hacer realidad tu idea.

Elaborar un plan financiero te ayudará a organizar y controlar todos tus gastos comerciales. De esta manera, podrás trabajar con tranquilidad, sabiendo exactamente cuánto necesitas gastar y cuánto dinero tienes disponible para ello.

5. Buscar socios e inversores

Si tu proyecto tiene como objetivo acceder a un mercado competitivo, es ideal contar con la colaboración de socios e inversores. De esta manera, no solo validarás tu idea, sino que también obtendrás financiamiento por parte de personas que te ayudarán a hacerla realidad.

Sin embargo, es importante analizar cuidadosamente esta situación. Recuerda que las sociedades comerciales se formalizan a través de contratos legales, por lo tanto, tómate el tiempo de leerlos detenidamente para asegurarte de que los términos sean favorables para tu negocio.

6. Desarrollar una cultura organizacional

Este consejo tiene como objetivo garantizar la salud y el crecimiento de tu negocio. Crear una cultura organizacional te permitirá administrar tu empresa de manera más práctica y efectiva.

La idea detrás de la cultura organizacional es fomentar una dinámica saludable entre todos los empleados y socios. Esto contribuirá a mejorar la productividad del equipo y el desarrollo empresarial.

Incluso si tu proyecto ya se encuentra en una posición estable, recuerda que comenzó con una idea y que todos los que te rodean también tienen algo para aportar, por lo tanto, escúchalos. Al fomentar una cultura colaborativa, ¡tu proyecto podrá crecer aún más!

Preguntas frecuentes

¿Cuáles son los tipos de emprendimiento?

• Emprendimiento digital.
• Emprendimiento de negocios.
• Intraemprendimiento corporativo.
• Emprendimiento social.
• Emprendimiento verde.
• Emprendimiento femenino.
• Emprendimiento individual.
• Emprendimiento cooperativo.

¿Qué consejos se pueden seguir para emprender con éxito?

• Definir claramente la actividad del emprendimiento.
• Crear una propuesta única para destacar en el mercado.
• Validar la idea obteniendo retroalimentación de personas relevantes.
• Elaborar un plan financiero para gestionar los gastos.
• Buscar socios e inversores adecuados para el proyecto.
• Construir una sólida cultura organizacional para el crecimiento a largo plazo.