- Se espera que la inflación de junio en Argentina confirme la desaceleración de los meses anteriores, aunque esto podría estar asociado a una disminución del nivel de actividad económica.
- Los datos preliminares de las consultoras privadas indican que la inflación de junio habría descendido levemente, luego del pico alcanzado en abril.
- El factor que explica esta reducción en la inflación es un menor aumento en los alimentos, especialmente en carnes, y una mejora en la oferta de frutas y verduras debido a la superación de la sequía.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dará a conocer en la tarde de este jueves 13 de julio los datos de inflación de junio de 2023. El Gobierno espera que se confirme la desaceleración respecto al mes anterior, aunque es posible que esto esté relacionado con una disminución en la actividad económica.
El Índice de Precios al Consumidor se publicará a partir de las 16:00 horas y será el último dato antes de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) que se llevarán a cabo el domingo 13 de agosto.
Las consultoras privadas adelantan que habrá una leve caída después del pico de inflación del 8,4% en abril, que descendió al 7,8% en mayo.
En el equipo económico pronostican que estos números reflejan el comportamiento de los precios, aunque esta disminución está acompañada de una reducción en la actividad económica.
No obstante, en el Ministerio de Economía prefieren destacar que después del preocupante 8,4% de abril, la inflación se situó en 7,8% en mayo y se espera que haya bajado aún más en junio.
Aunque reconocen que esta cifra sigue siendo muy alta, se percibe cierto alivio al romperse la tendencia al alza y reducir levemente su ritmo, en lugar de superar los dos dígitos.
El promedio de los estudios de analistas indica que el aumento de precios del mes pasado se encuentra en el rango del 7,2% al 7,4%, lo que confirmaría el cambio de tendencia, aunque advierten que no se puede considerar definitivo.
En el equipo económico tienen la esperanza de que la cifra comience con «6», ya que eso fortalecería el discurso oficial sobre la gestión en materia de precios.
El factor que explica la reducción en el ritmo inflacionario es un menor aumento en los alimentos. Los análisis privados señalan que el aumento de la carne fue menor al promedio de otros productos y que el precio del pollo se estabilizó después del brote de gripe aviar. Además, al superarse la sequía, se mejoró la oferta de frutas y verduras, lo que frenó el avance de los precios.
En junio, los mayores aumentos se registran en los gastos del hogar, tanto en alquileres como en servicios públicos, que experimentaron fuertes incrementos el mes pasado.
Además, los primeros indicadores en relación a julio indican que al menos al comienzo del mes, esta tendencia de desaceleración se mantuvo.
La noticia preocupante es que la reducción de la inflación se acompaña de una disminución en el consumo y en el nivel de actividad debido a la pérdida de poder adquisitivo de los ingresos.