- Una forma común para los argentinos de expandir sus fuentes de ingresos en el mercado exterior es abrir una empresa en los Estados Unidos, especialmente a través de una sociedad como una Limited Liability Company (LLC). Esto les permite proteger sus activos personales en caso de problemas legales y tener una mayor organización y profesionalismo en sus operaciones.
- Para abrir una sociedad en los Estados Unidos, se debe registrar un "Doing Business As" (DBA) y se recomienda hacer un acuerdo de asociación. También se debe obtener un número de identificación de la empresa (EIN) para cumplir con las obligaciones fiscales. Los costos de apertura estimados comienzan en $800 USD para estructuras básicas.
- Un argentino que abre una empresa en los Estados Unidos solo tendrá responsabilidad fiscal en ese país si es residente fiscal allí o si más del 25% de los miembros de la empresa son extranjeros. Existe la opción de estructurar la empresa como una corporación (C-Corp) o como una empresa híbrida (S-Corp) que combina características de una corporación y una sociedad.
Los argentinos buscan cada vez más ingresar al mercado internacional para diversificar sus fuentes de ingresos, tanto de manera pasiva como activa. Una opción comúnmente utilizada es la apertura de una empresa en los Estados Unidos. Aunque existen diversas estructuras para empresas extranjeras, una de las opciones más populares es la formación de un partnership o sociedad en español, que implica una asociación entre dos o más miembros.
Un ejemplo común de sociedad es el de las Limited Liability Companies (LLCs). En estas empresas, las decisiones administrativas son tomadas por los miembros fundadores. Uno de los beneficios es la protección de los activos personales en caso de inconvenientes legales, como un juicio, ya que serán los activos de la empresa los que responderán si es necesario. Otros beneficios incluyen la centralización y organización de operaciones, un mayor nivel de profesionalismo y la posibilidad de abrir una cuenta bancaria en los EE.UU. para realizar transacciones comerciales, incluso desde el extranjero.
Para constituir una sociedad, primeramente se debe realizar el registro del «Doing Business As» (DBA) – un documento que establece el nombre comercial de la empresa y nos permite llevar a cabo transacciones comerciales manteniendo nuestra identidad jurídica. Es decir, utilizamos un nombre comercialmente pero respondemos legalmente con nuestro nombre propio.
En segundo lugar, se recomienda (aunque no es un requisito) llevar a cabo un acuerdo de sociedad. Este acuerdo reflejará las normas internas de la empresa, registrará el capital aportado por cada socio y la estructura administrativa, entre otras directrices. Será útil para resolver posibles conflictos internos en el futuro. En algunos estados, dependiendo del sector, también será necesario obtener una licencia local para operar.
Un requisito adicional para abrir una empresa es solicitar un número de identificación, conocido como el Employer Identification Number (EIN). Este EIN es similar al número de Seguro Social a nivel personal y se solicita mediante el Formulario SS-4. Obtener este número nos permitirá tener una identificación fiscal para cumplir con las regulaciones tributarias establecidas por el IRS (la entidad recaudadora de impuestos en Estados Unidos).
La responsabilidad fiscal de una empresa se refleja a través del concepto de «pass through tax». Esto significa que la declaración de impuestos de la empresa (Formulario 1065) reflejará las actividades de la compañía, pero la empresa en sí no pagará impuestos directamente. En su lugar, los impuestos se trasladarán (pass through) a los miembros de la empresa a través del Formulario K-1.
Tal como mencionamos anteriormente, los miembros de la empresa serán los responsables individuales de su porcentaje de participación. Por esta razón, un ciudadano argentino puede abrir una empresa de forma remota y declarar sus ganancias a través del monotributo en Argentina. Solo tendrá responsabilidad fiscal en los Estados Unidos si sus ingresos están efectivamente vinculados a dicho país y si es considerado residente fiscal allí (trabaja en EE.UU. 183 días al año o más). En caso de que el 25% o más de los miembros sean extranjeros, también se requiere una documentación adicional (Formulario 5472) para informarlo.
Es importante destacar los costos asociados con la apertura de una empresa. En principio, los gastos incluyen contratar un agente registrado que pueda encargarse de los documentos de incorporación y la apertura de la cuenta bancaria, las tarifas mensuales de mantenimiento dependiendo del estado, los honorarios tributarios y, en algunos casos, costos contables y de registro. Sin embargo, estos últimos no necesariamente requieren un agente y pueden realizarse por cuenta propia. Se estima que el costo total comienza en $800 para el primer año en casos con estructuras básicas, y lógicamente aumentará en función de la extensión y los servicios deseados.
Existe también la opción de establecer la empresa como una corporación en lugar de una sociedad. Un ejemplo de corporación es una C-Corp, donde la diferencia administrativa principal es que las decisiones son tomadas por una junta ejecutiva elegida por los accionistas. Desde una perspectiva fiscal, una corporación paga impuestos sobre sus ganancias, mientras que los accionistas solo tributan por los dividendos recibidos.
Sin embargo, es posible optar por una estructura de empresa híbrida en la cual se administra como una corporación (C-Corp) pero se tributa como una sociedad (LLC). Esta opción se conoce como S-Corp.
*Gonzalo Serravalle, experto en temas impositivos en Estados Unidos; Primetax