La tan esperada llegada de Starlink, el servicio de internet satelital de Elon Musk, a Argentina ha sido pospuesta. A pesar de tener planes iniciales para comenzar sus operaciones en el cuarto trimestre de 2022, la compañía ha decidido retrasar el lanzamiento hasta 2024, luego de las elecciones argentinas.
Starlink, un proyecto que comenzó su desarrollo en 2015 y tuvo su primer lanzamiento en 2019, es un servicio desprendido de SpaceX, la famosa empresa de tecnología espacial. El 19 de enero, un cohete SpaceX Falcon 9 puso en órbita terrestre baja cuatro docenas de satélites Starlink, expandiendo así su red de más de 3.000 satélites diseñados para ofrecer internet de alta velocidad y baja latencia en las áreas más remotas del planeta.
La empresa ya tiene un millón de usuarios activos en todo el mundo, y el servicio ya funciona en países como Brasil, Chile, México, República Dominicana, Puerto Rico y Jamaica. Además, Starlink tiene planes de expansión en otros países de la región en los próximos meses, incluyendo Ecuador, Perú, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Paraguay y Uruguay.
En países vecinos donde Starlink ya ha comenzado a operar, el impacto ha sido notable. En Chile, por ejemplo, Starlink se ha posicionado como uno de los servicios de internet más rápidos, según Remender Chile. Esta destacada prestación podría revolucionar los servicios de internet que existen hoy en día en Argentina, ofreciendo una opción competitiva y de alta calidad, especialmente en zonas donde el acceso a internet de alta velocidad ha sido tradicionalmente limitado. La expectativa crece en torno a cómo Starlink podría alterar el panorama de las telecomunicaciones en Argentina, brindando una mayor inclusión digital y opciones de conectividad.
Aunque la página de Starlink aún permite a los usuarios argentinos reservar su prestación por 9 dólares estadounidenses, la fecha de lanzamiento en Argentina ha sido misteriosamente retrasada. La compañía ya cuenta con aprobación para operar desde diciembre de 2020 y se inscribió en marzo del año pasado, por lo que este aplazamiento sorprende a muchos.
Starlink competiría con Arsat, la compañía estatal de telecomunicaciones encargada de llevar internet satelital a zonas remotas en Argentina, como escuelas o establecimientos públicos. La tecnología de Starlink está pensada para ofrecer servicios de alta velocidad de internet en cualquier lugar del mundo, incluso en situaciones de emergencia como en Ucrania, donde el servicio fue liberado para los habitantes tras la invasión rusa.
La empresa también explicó que están buscando introducir dos nuevas opciones de servicio, incluyendo la posibilidad de ofrecerlo a través de empresas de telefonía móvil y una alternativa con límite de datos, donde se pasa a conexión lenta una vez superado dicho máximo.
La postergación de Starlink en Argentina genera expectación y preguntas. Los ojos estarán puestos en cómo este gigante tecnológico planea insertarse en el mercado argentino y cómo afectará al panorama de las telecomunicaciones en el país.