¿Me conviene ser monotributista? Ventajas y desventajas a tener en cuenta

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Optar por el Régimen Monotributo te brinda una serie de beneficios valiosos como estar cubierto por una obra social, la posibilidad de realizar aportes jubilatorios y poder facturar a un grupo de personas

Cada vez más personas eligen ser monotributistas gracias a las ventajas que ofrece, como estar cubierto por una obra social y la posibilidad de hacer aportes jubilatorios. No obstante, es importante evaluar los casos en los que el Régimen Monotributo no es la mejor opción.

¿Qué beneficios y desventajas tiene el Régimen Monotributo?

Al igual que ocurre en cualquier otro protocolo, el Régimen Monotributo conlleva beneficios y desventajas, por lo que es relevante realizar un análisis correspondiente.

En lo que se refiere a sus beneficios, encontramos los siguientes:

  • Dinero en blanco: al inscribirte en el Régimen Monotributo, dispones de tu dinero en blanco, el cual puedes ahorrar (como comprar dólares), invertir e incluso adquirir bienes, como un automóvil, pudiendo justificar los fondos (en la medida en que los gastos sean «razonables» en relación a los montos facturados)
  • Obra social: al darte de alta en el Régimen Monotributo, puedes elegir una obra social y contar con la protección médica que necesitas
  • Aportes jubilatorios: la cuota del Régimen Monotributo incluye los aportes para la jubilación. De este modo, en el futuro, tendrás derecho a una jubilación estatal
  • Más clientes: dependiendo de tu actividad laboral, es probable que, como monotributista, tengas varios clientes, como por ejemplo un abogado. A diferencia del trabajo en relación de dependencia, facturas por tus servicios, permitiéndote tener muchos clientes y, en muchos casos, resulta menos oneroso para aquellos que te contratan
  • Pago unificado y menores costos: el Régimen Monotributo permite pagar tus obligaciones fiscales y previsionales en una cuota única, ahorrándote los gastos de tener que hacer una declaración jurada por cada impuesto (como IVA y Ganancias). Es importante destacar que el Régimen Monotributo no incluye otros impuestos como Ingresos Brutos

¿Me conviene ser monotributista? Beneficios y desventajas a tener en cuenta

En cuanto a las desventajas, podemos citar las siguientes:

  • No puedes deducir ciertos impuestos como el IVA: el IVA es uno de los impuestos de mayor uso en Argentina. Este impuesto normalmente lo abona el consumidor final, ya que las compañías y personas inscritas en el Régimen General pueden deducirlo. No obstante, en el caso del Régimen Monotributo, este no es deducible
  • Límites de ingresos: el Régimen Monotributo habitualmente tiene límites en cada categoría, estableciendo un monto máximo anual para los alquileres y prestaciones de servicios, como también en la venta de bienes muebles. Si superas estos límites, perderás la condición de monotributista
  • Restricciones en el desarrollo de tu actividad: además de los límites en los ingresos, el Régimen Monotributo también presenta algunas restricciones como la superficie dedicada al desarrollo de tu negocio o la cantidad de energía eléctrica consumida anualmente
  • No disponer de las ventajas correspondientes a un trabajo en relación de dependencia: si eres monotributista, no tienes derecho a las ventajas que un empleado registrado de una empresa tiene, como vacaciones pagas, indemnizaciones, licencias por enfermedad, entre otros

¿Cuándo me conviene ser monotributista?

Si tu actividad económica no es lo suficientemente grande como para inscribirte en el régimen general, es recomendable que te inscribas como monotributista. Esto se debe a que, al hacerlo, tendrás que pagar una menor cantidad de impuestos y no tendrás que incurrir en otros costos adicionales, como el pago a un contador público para la elaboración de tus declaraciones juradas.

Además, si eres un responsable inscripto, tendrás que presentar una declaración jurada por cada tributo.

Por otro lado, ser monotributista es una buena opción para aquellas personas que desean realizar una actividad económica independiente, ya que les permite tener horarios más flexibles y la posibilidad de tener más de un trabajo en comparación con el trabajo en relación de dependencia.

Sin embargo, como ya se mencionó anteriormente, ser monotributista tiene algunas desventajas, como la imposibilidad de tener vacaciones pagas, licencias por enfermedad, entre otras cosas.

Beneficios de ser monotributista

Existen varios beneficios que se obtienen al inscribirte en el régimen del monotributo:

  • Ingreso en blanco: como monotributista, todos tus ingresos estarán registrados y justificados, lo que te permitirá ahorrar, invertir o adquirir bienes.
  • Menos carga impositiva: al estar inscripto en el régimen del monotributo, pagarás menos impuestos en comparación con el régimen general
  • Menos obligaciones administrativas: En comparación con el régimen general, el régimen del monotributo tiene menos obligaciones administrativas, lo que le quita carga a tu tiempo y te permite enfocarte más en el desarrollo de tu actividad económica.
  • Aportes a la jubilación y obra social: Como monotributista, podrás acceder a los aportes jubilatorios y de obra social que son necesarios para estar cubierto en esos aspectos.
  • Acceso al sistema bancario y créditos: estar inscripto en el régimen del monotributo permite tener acceso al sistema bancario y acceder a créditos bancarios, lo cual puede ser necesario para el crecimiento de tu actividad económica.
  • Incentivo al cumplimiento: se incentiva el cumplimiento de las obligaciones tributarias por parte de los monotributistas mediante beneficios fiscales y la simplificación de los trámites administrativos.

Ingreso en blanco

Al estar inscripto en el régimen del monotributo, todos tus ingresos estarán registrados y justificados, por lo que podrás ahorrar, invertir o adquirir bienes, manteniendo tus finanzas claras y en orden.

Menor carga impositiva

El régimen del Monotributo establece el pago de una cuota fija mensual, en función de la categoría en la que se encuentre inscripto el contribuyente.

Así, aunque la facturación mensual varíe, el importe a pagar permanece invariable siempre y cuando no se supere el límite de ingresos permitido por cada categoría.

En cambio, un Responsable Inscripto deberá pagar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) en función de los ingresos obtenidos durante el mes. En promedio, el Monotributo resulta más económico que el IVA.

Menos obligaciones administrativas

El Monotributo implica menos obligaciones administrativas ante la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) al no requerir la presentación de Declaraciones Juradas mensuales ni anuales para efectuar el pago de los impuestos.

Esto garantiza una mayor agilidad y simplificación en las gestiones tributarias a cargo del contribuyente.

Por su parte, el Responsable Inscripto está obligado a confeccionar mensualmente la Declaración Jurada de IVA, que determinará el monto a abonar. La falta de presentación de dicha declaración es pasible de multas por parte de la AFIP.

Aportes jubilatorios y de obra social

El Monotributo contempla la posibilidad de acceder a una obra social y hacer aportes destinados a la jubilación; beneficios que se encuentran incluidos en la cuota mensual.

Esta cuota se divide en dos partes: el impuesto correspondiente y los aportes previsionales (obra social y jubilación).

Acceso a la banca y préstamos como Monotributista

El hecho de ser Monotributista implica contar con ingresos debidamente declarados y organizados.

Esto te brinda la posibilidad de acceder sin problemas a cualquier beneficio bancario como la apertura de una cuenta de ahorro, solicitud de préstamos y tarjetas de débito y crédito.

Si eres Monotributista, es necesario que realices una declaración semestral en la página web de AFIP en los casos que tus facturaciones y gastos superen los límites establecidos en tu categoría.

En caso de que estos parámetros superen lo permitido para la categoría correspondiente, el contribuyente deberá darse de alta en IVA y Ganancias, dejando de abonar el Monotributo.

En caso de que el contribuyente decida no realizar estos cambios, la AFIP se encargará de excluirla automáticamente del régimen de Monotributo.

Incentivos al cumplimiento

Por mantener un plazo de pago mensual correcto durante un año calendario mediante débito automático o tarjeta de crédito, recibirás el reembolso del componente impositivo de un pago mensual.

¿Cómo puedo registrarme en el Monotributo?

Para registrarte en el Monotributo debes seguir estos simples pasos:

  1. Acceder a la página oficial de la AFIP con la clave fiscal y aceptar los datos biométricos que se registraron al tramitar la CUIT y la clave fiscal.
  2. Seguidamente, se debe declarar la actividad que se va a realizar (en caso de realizar más de una se deben agregar), escogiendo el servicio «Sistema Registral» y luego la opción que corresponda.
  3. Posteriormente, se debe elegir la opción «Registro tributario» y después «Monotributo«.
  4. A continuación, se debe seleccionar la opción «Adhesión«, ingresar el número de CUIT y generar la declaración jurada.
  5. Finalmente, se deben completar los datos requeridos sobre la actividad y seleccionar una obra social (en caso de no tener una previamente, como por ejemplo por un trabajo en relación de dependencia) para completar la inscripción.

Preguntas frecuentes

¿Cuáles son las ventajas y desventajas de ser monotributista?

El régimen de monotributo tiene como ventajas contar con ingresos en blanco, tener acceso a una obra social y realizar aportes jubilatorios. No obstante, también presenta algunas desventajas a tener en cuenta.

¿Qué beneficios se obtienen al ser monotributista?

El régimen de monotributo brinda a quien lo adopta la posibilidad de tener ingresos en blanco, lo que permite guardar, invertir y comprar bienes demostrando el origen de los fondos, así como acceder a una obra social y tener aportes jubilatorios. También, al ser una cuota única, simplifica el pago de impuestos y se tiene la posibilidad de tener varios clientes.

¿Cuáles son las desventajas de ser monotributista?

Entre las desventajas de ser monotributista, se encuentran el hecho de que no se pueden deducir impuestos como el IVA, los límites de ingresos que están permitidos en cada categoría, las limitaciones a la hora de desarrollar la actividad (por ejemplo, la superficie que se puede utilizar para el negocio) y la ausencia de beneficios laborales como vacaciones pagas o licencias por enfermedad, como sí están presentes en un trabajo en relación de dependencia.

¿Cuándo es conveniente ser monotributista?

El régimen de monotributo es conveniente para aquellas personas cuya actividad no es lo suficientemente grande como para inscribirse en el régimen general, lo que les permite evitar mayores tributos y gastos administrativos. También es una buena opción para aquellos que desean tener una actividad económica independiente, con más flexibilidad horaria y la posibilidad de tener más de un trabajo.

¿Cómo puedo inscribirme en el régimen del monotributo?

Para inscribirse en el régimen del monotributo, es necesario acceder al sitio web oficial de AFIP con la clave fiscal y confirmar los datos biométricos. Luego, se debe declarar la actividad que se va a realizar y seleccionar la opción «Registro tributario», seguida de «Monotributo». A continuación, se debe optar por la alternativa «Adhesión», indicar el número de CUIT y completar la declaración jurada con los datos correspondientes según la actividad llevada a cabo. Finalmente, se debe seleccionar una opción de obra social y seguir los pasos necesarios para completar el proceso de inscripción.